A través de la asistencia técnica, el cliente puede hablar directamente con un experto que estará en condiciones de proporcionarle ayuda inmediata, analizar sus necesidades y prever las acciones específicas a emprender.
Un procedimiento automático permite registrar, analizar y procesar las solicitudes del cliente. Gracias a este procedimiento, todas las indicaciones y observaciones recibidas se tienen en cuenta para mejorar los niveles de calidad del producto o servicio, con el propósito específico de personalizar las máquinas y los servicios según las necesidades reales del mercado.